Una vez preguntado por el origen de la palabra chisme, toca explicar sobre qué fue la conversación. Resulta que el chisme contaba que cierta persona del barrio solía tirarle los tejos a mi abuelo materno. Y claro, entonces pensé "qué bien, otra expresión curiosa para buscar su origen".
El DLE define la expresión como:
- loc. verb. coloq. Poner los puntos.
- loc. verb. coloq. Insinuarle a alguien el interés que se tiene puesto en él, o manifestarle indirectamente lo que de él se espera.
Muy bien, pero ¿qué es un tejo? ¿Y por qué hay que tirarlo para intentar ligar con alguien?
- m. Pedazo pequeño de teja o cosa semejante, que se utiliza en diversos juegos.
- m. Cada uno de los juegos en que se emplea el tejo, como la rayuela o el chito.
Bien, parece que la cosa va de juegos, y efectivamente así lo confirma Alfred López en su blog:
El origen de esta expresión proviene de un antiguo juego llamado el tejo, que consistía en tirar una piedra o trozo de teja [...] contra un palo de madera clavado/depositado en el suelo y cuyo objetivo era derribarlo. Normalmente se jugaba en plazas o parques públicos y en los que mientras unos jugaban otras personas paseaban o estaban sentadas en algún banco cercano.
Era usual que, cuando a algún muchacho le gustaba una de las chicas que por allí se encontraban, tirase el tejo a una distancia cercana de donde estaba ésta y, con la excusa de ir a recogerlo, aprovechase para insinuarse, charlar o hacerle ver su interés por ella.
Muy bien, la explicación parece plausible, pero hay algo que no me cuadra. Hay referencias del juego del tejo en textos hasta del siglo XVI:
Ver a las mil maravillas
los juegos que allí s'armavan: [...]
Oras a hurta el capote,
oras a daca el ovillo,
oras asconde 'll orillo,
oras a dile más diote,
oras a hinca el picote
oras a passa morato,
y a la chueca y al garrote,
y al tejo y a guarda el hato.Bartolomé de Torres Naharro, "Comedia Jacinta [Propaladia]", 1517 (España).
Y de hecho las acepciones mencionadas de tejo aparecen ya en el Diccionario de Autoridades. En cambio, solo encuentro casos de la expresión tirar los tejos en textos a partir de 1970 en el CORDE:
No, no era mala para novia la Media Almendra pero era poco para él y nunca le tiró los tejos del amor.
Antonio Díaz-Cañabate, "Paseíllo por el planeta de los toros", 1970 (España).
Me parece un salto muy grande como para que la expresión se haya popularizado de la forma en la que afirma Alfred López, dado que por lo que cuenta parecería que se haya usado así desde hace siglos. Sin embargo, la primera acepción coloquial de tirar los tejos se recoge en el DLE en 1956:
Tirar los tejos. fr. fig. y fam. Poner los puntos.
El significado de esta última es:
- loc. verb. Dirigir la mira, intención o conato a un fin que se desea.
Es decir, parece que tiene su origen más en la acción de apuntar con la piedra o tejo a un objetivo, que a la picardía de tirar el tejo en la dirección "equivocada" con intenciones insinuatorias. De hecho, la acepción de insinuarse a una persona se recoge por primera vez en el Academia Manual de 1985. Tal vez por eso la expresión se usa en el ejemplo de 1970 como "tirar los tejos del amor", con esa necesidad de aclarar que son "del amor" y no de otra cosa.
Así pues, en principio la historia que cuenta Alfred es muy bonita pero no parece cierta. ¿O sí? ¿Se me escapa algo? ¿Hay algún uso de la expresión "tirar los tejos" o similar antes del siglo XX, que pueda hacer pensar que la historia es cierta? ¿O realmente la expresión se originó primero como sinónimo relativamente reciente de "poner el punto de mira en algo" de forma más genérica, y ya de ahí saltó al terreno amoroso? Me cuesta trabajo pensar que la expresión venga de antiguo y solo se transmitiera de forma oral hasta bien avanzado el siglo XX. ¿Tal vez he malinterpretado el artículo y el origen es el que afirma Alfred pero es mucho más reciente de lo que aparenta?